El rosa y el azul y su asociación con los géneros en la historia

Hace siglos, las mujeres vestían de azul y los hombres de rosa. El azul, ligado a la pureza y a la feminidad, era llevado por las damas, mientras que el rosa, que proviene del rojo sangre, era muy llevado por los hombres.

Empecemos por el principio. En estampas religiosas del renacimiento, muchas de las vírgenes vestían de azul, un color más ligado a la pureza, mientras que Jesús o los apóstoles vestían en tonos tierra o rosados.

El Cardenal (Rafael, 1510)

Hacia el siglo XVIII, la alta burguesía continuaba utilizando estos colores para cada género. El azul se consideraba un color delicado, ligado a la feminidad, mientras que el rosa era un color que recordaba al rojo sangre, asociado a la masculinidad, que se comenzó a utilizar para vestir a los hombres. Sin embargo, estos colores no se utilizaban para distinguir los géneros.

Retrato de Michał Kazimierz Ogiński (Anna Rosina de Gasc, 1755)
María Antonieta con una rosa (Elisabeth Louise Vigee Lebrun, 1783)

Antes de la I Guerra Mundial, los bebés vestían de blanco, sin diferenciación alguna. La primera diferenciación de estos colores atribuyéndose a género fue cuando la revista Earnshaw’s Infants’ Department publicó en 1918 la siguiente sentencia: “La regla generalmente aceptada es rosa para los chicos y azul para las chicas. La razón es que el rosa es un color más decidido y fuerte, más adecuado para los niños, mientras el azul, que es más delicado y refinado, es mejor para las niñas”.

María Teresa y Luis Carlos (año y autor desconocidos)

No fue hasta bien entrado el siglo XX, a partir de los años 40 y tras la II Guerra Mundial, cuando se invirtieron los roles de género del rosa y el azul. Los hombres comenzaron a vestir de azul por sus uniformes de guerra, color asociado al valor, al heroísmo y a la fuerza. También influyó que, durante la guerra, los nazis marcaran a los homosexuales con triángulos rosa, color asociado a la masculinidad hasta entonces. Finalmente, esta convención se asentó en los ochenta, con el auge de la publicidad y los nuevos medios, como la televisión en color.

Esta imposición se mantiene hoy en día, y aunque cada vez menos, la seguimos viendo, por ejemplo, en la tasa «rosa» de los productos para la higiene femenina, en los juguetes de niños, o en el símbolo del cáncer de mama. Aunque poco a poco, estemos deshaciéndonos de la imposición de estas asociaciones, queda mucho por recorrer.

Artículo por Mar de Garrido.

* imagen de portada: cuadro “Jesús entre los doctores” (Pablo Veronese, 1560)

Anuncio publicitario

Los pantalones más de moda son los ‘cargo’

Los pantalones más cómodos, los pantalones ‘cargo’ o pantalones de combate, son aquellos que normalmente tienen un diseño ligeramente suelto y están caracterizados por una gran cantidad de bolsillos utilitarios.

Ya los vimos en el ‘street style’ de las semanas de la moda de este 2022, especialmente, en la de Copenhague, pero ahora han monopolizado las calles y las redes.

Carlota Maranon ©carlomaranon

Directamente relacionados con la tendencia Y2K, pero también con el estilo ‘warcore’, o con el ‘techwear’, este tipo de pantalones se han adueñado tanto del ‘street style’, como de las pasarelas de estas últimas temporadas. Lo que los convierte en la prenda perfecta es que son muy versátiles, cómodos, y que además pueden encontrarse casi en cualquier estilo.

Las influencers nos proponen todo tipo de looks con estos pantalones –como los que lleva Carlota, de H&M–, pudiendo combinarse con un estilo más ‘athleisure’, con unas botas militares o hasta con tacones.

Bershka, por ejemplo, tiene hasta una propia sección en su web dedicada a este tipo de pantalones: «cargo». En casi todos los colores y una gran variedad de estilos, Inditex nos propone variaciones de estos pantalones para todos los gustos.

El modelo original de este tipo de pantalón fue creado por los soldados británicos, inspirados por los que utilizaban los paracaidistas, de un color verde caqui que permitía su camuflaje y una silueta recta marcada por una multitud de bolsillos utilitarios que utilizaban para guardar herramientas, mapas o cualquier cosa que necesitaran tener a fácil acceso.

Ahora, esta versátil prenda es vista con asiduidad en todas las tiendas de ropa desde hace años, y lo que está claro, es que esta tendencia militar ha llegado para quedarse.

Sofia Coelho ©sofiamcoelho

Artículo por Mar de Garrido.