Hay una artista en el panorama musical actual que nunca decepciona y este sin duda es The Weeknd, cantante canadiense quien hace unos días sacó el videoclip de su último single “Out of Time”. Hace ya unos meses analizamos las referencias del video musical “La Fama” que protagonizó junto a Rosalía, pero hoy vamos a centrarnos en las similitudes de este último videoclip con la película de Sofia Coppola “Lost in Translation”.
«Lost in translation» es sin duda una obra bastante llamativa a nivel visual, una coproducción japonesa-americana que se nutre de las referencias estéticas asiáticas modernas para contarnos la historia de amor de sus protagonistas. Por lo visto, al equipo artístico de The Weeknd le ha llamado bastante la atención la dirección artística del filme y ha decidido inspirarse en ella para “Out of Time”.
Pero ya no es solo en la estética japonesa en lo que se inspira el video, sino que vemos referencias casi exactas a la película. El video está protagonizado por Ho Yeon Jung («El juego del calamar») y el mismo The Weeknd, pareja totalmente inspirada en los protagonistas de Coppola: dos personas solitarias que se conocen en un Tokio moderno y impregnado de un aire melancólico que impregna toda la película. Este ambiente continua durante todo el videoclip, incluso recreando icónicas escenas como en las que vemos a un The Weeknd y a Jung solitario en el bar, las dos secuencias de ambos protagonistas en el espejo o las míticas series de karaoke japonés. Los travellings de los personajes corriendo de espalda o alejándose también se refleja en la obra de Coppola, un claro reflejo a lo intimista que puede llegar a ser el film.
En general más que mera inspiración se podría decir que “Out of Time” es un homenaje a una película tan artísticamente impactante como lo es «Lost in Translation”.
Hace poco más de un año dedicamos un artículo al auge de la estética ‘dosmilera’ y de la posibilidad de su éxito posterior, y razón no nos faltó: el ‘Y2K’ lleva ya muchos meses arrasando en todas las tiendas. La moda de esta época está conformada de muchos tipos de prendas y accesorios, pero hoy nos vamos a centrar en una concreta: los pantalones de tiro bajo, esa polémica prenda que muchas mujeres no quieren que vuelva.
Si echamos un vistazo al auge de estos pantalones nos encontramos con ‘celebrities’ como Paris Hilton, Britney Spears o Lindsay Lohan entre muchas otras: famosas con cuerpos delgados caracterizadas por tener el abdomen plano y extremidades muy finas.
Las décadas de los 90 y 00 estuvieron muy marcadas por la adopción un canon de belleza donde primaba la delgadez extrema, reafirmado por el apogeo de las revistas de prensa rosa que portaban imágenes de mujeres con cuerpos esqueléticos acompañados en muchas ocasiones de pantalones de tiro bajo.
Hoy en día, la sociedad está comenzando a superar esta imposición de cánones absurdos que en lo único que han ayudado es en el aumento de muchos trastornos de conducta alimentaria, sobre todo, en la población femenina.
Nos preguntamos ahora, ¿qué tendrá que ver todo esto con un simple pantalón? La respuesta está en que el vaquero de tiro bajo ha significado un instrumento de tortura para millones de mujeres quienes se sentían muy inseguras al lucir su abdomen, preocupadas por entrar en el absurdo canon. Hace unos días preguntamos a unas cuantas amigas su opinión sobre la vuelta de esta controvertida prenda de ropa, y sus testimonios fueron de lo más interesantes:
«Yo creo que la gente se seguiría sintiendo incómoda porque creo que las tías seguimos teniendo mucha presión con nuestro cuerpo y con estar delgadas y esos pantalones al final están hechos con la idea de lucir un abdomen plano. Representa una especie de atraso»
«A mi me encanta como le queda a Bella Hadid, pero es que todas no tenemos ese cuerpo»
«Yo creo que no hay prendas hechas para todos los tipos de cuerpos, pero ahí ya entra la seguridad de la persona a llevar cualquier prenda y de su actitud»
¿Es verdad esto? ¿No están estos pantalones hechos para todos los cuerpos? ¿No hemos superado aún el vincular cualquier prenda de ropa con un cuerpo determinado? La respuesta a todas estas preguntas se encuentra en la confección de la prenda. En los vaqueros de tiro bajo la altura queda justo en la cadera, haciendo que la única manera de sujetarlo sea quedando ajustado, por lo que, además de ser algo incómodos, es fácil que se formen pliegues en la piel (si no eres Bella Hadid o Kendall Jenner). Es por ello por lo que muchas veces nos sentimos inseguras llevando este tipo de pantalón tan complicado de encajar.
Aunque ahora el tiro bajo no tiene por qué llevarse tan ajustado como el que se estilaba en los 2000, lo que no queremos es caer en una tendencia que sólo vaya a ser socialmente aceptada si es llevada por personas delgadas. Debemos pues, deconstruir la moda y las tendencias pudiendo recoger todo tipo de cuerpos en las mismas. Que la moda no sea excluyente.
El pasado 18 de marzo, Rosalía estrenó “Motomami”, un álbum muy esperado que llevaba en boca del público meses, y no todas las opiniones eran favorables.
La cantante catalana llevaba desde el año pasado creando mucho hype acerca de su nuevo disco, y aunque en 2021 algunas de las canciones del anterior álbum comenzaron a generar expectativas, éstas incrementaron aún más cuando la artista publicó un tik tok donde adelantaba 25 segundos de unos de los temas principales del disco, “Hentai”. En este momento, nadie podía entrar en Twitter sin leer el nombre Rosalía. La cantidad de críticas y memes sobre su nueva canción eran descomunales, sobre todo comparando este nuevo disco con “El mal querer”, pese a que la única información que estos usuarios tenían eran pequeños trozos de temas. Esta polémica continuó unos días y se vio reforzada por títulos o avances de otras canciones del disco, como “Chicken Teriyaki”. Pero aún para mal, el nombre de la intérprete se mantuvo en boca de todos durante meses y la burla y el meme al fin al cabo resultó una gran estrategia de marketing.
Ya a principios de mes, semanas antes del estreno de “Motomami”, comenzó la campaña de promoción oficial del disco. El equipo de marketing de Rosalía se encargó de empapelar las calles de la ciudad de Barcelona con unos originales carteles publicitarios donde podíamos ver títulos de sus nuevos temas como si fueran carteles de servicios, todos acompañados con un número de teléfono: “Chicken Teriyaki. Special Delivery. Entrega con patines eléctricos no motorizados. ¡Llama ya y pruébalo! 654264018”.
Lo mejor de toda la campaña es que si llamas al número de teléfono te encontrarás con el audio que utilizó Rosalía al anunciar el disco, en el que canta en bucle: “Motomami, motomami, motomami”. Resumiendo, una campaña espectacular que unida a toda la discusión en redes hizo a miles de personas contar los días para el estreno del disco, aunque sólo fuera para criticarlo.
Finalmente la espera terminó, y el 18 de marzo salió en España el esperado tercer álbum de la cantante. Sólo un día después, éste se consolidó como el mejor disco internacional de la época según la crítica americana tras recibir una puntuación de 95/100 de parte de Metacritic. Un disco vanguardista y experimental que sólo podía hacer una artista con su fama y su nivel, mezclando muchos géneros y estilos. De la noche a la mañana Twitter España pasó de criticar y de burlarse de Rosalía a rendirse a sus pies ante un álbum que a pesar de no ser del agrado de todo el mundo tiene un grandísimo mérito.
El próximo 4 de marzo, DC Comics estrena una nueva versión de uno de sus superhéroes más destacados: Batman, protagonizada esta vez por Robert Pattinson y Zoe Kravitz. La gira promocional de la película está dejando muchas expectativas en los fanáticos, sobre todo debido a su promoción caracterizada por la química y la puesta en escena en las apariciones de los protagonistas.
Que la promoción de esta nueva entrega está siendo un éxito es algo que nadie puede negar, y aunque esto se debe a muchísimos factores, hoy vamos a destacar los estilismos, al igual que hicimos con la gira promocional de Zendaya con “Spiderman: No Way Home” (Jon Watts, 2021).
Batman y Catwoman en cómic
El responsable de esta campaña estilística es Mobalaji Dawudu, editor de moda de la revista GQ enfocada en moda masculina. Este gran estilista ha sido el responsable en vestir a Pattinson durante toda la gira promocional de “The Batman”.
Dawudu ha basado los looks del actor en la imagen misteriosa y gótica que acompaña tanto al personaje que interpreta en el filme como a su propia trayectoria actoral. Sobre todo vamos a centrarnos en el conjunto que lució Robert Pattinson en el estreno de la película el pasado 23 de febrero en la ciudad de Londres, un traje de tejido tweed ‘oversize’ de la diseñadora alemana minimalista Jil Sander que enfoca muy bien el estilo ‘grunge’ que se le ha querido dar al actor durante la gira.
Por su lado, Kravitz también impactó a las cámaras con un ‘total black look’ de Saint Laurent conformado por un vestido largo entallado que se ciñe en la cintura y con detalles ‘cut-out’ en el pecho. A pesar de su minimalismo, el vestido refleja muy bien ese estilo ‘noir’ seductor del personaje del personaje que interpreta, Catwoman.
Una de las tendencias que más está triunfando esta temporada es la conocida como ‘Varsity’. Este estilo, caracterizado principalmente por las chaquetas beisboleras y las sudaderas de inspiración ‘college’, además de gorras, polos, cárdigans, y donde predominan el verde, el granate y el beige.
Este tipo de prendas, inspiradas en las ‘letterman jackets’ de los equipos deportivos americanos, tienen su origen en 1865, donde las chaquetas, adornadas con una ‘H’ en el pecho, fueron creadas por el equipo de béisbol de la universidad de Harvard. Normalmente llevaban añadida la inicial de la universidad, la mascota del equipo y su nombre bordados, e incluso se podían ir añadiendo detalles como el apellido del jugador en la parte trasera o pins distintivos según los años de participación en el equipo. Comenzaron a popularizarse en el ‘street style’ en los 50, y más tarde en los 80, tras el lanzamiento de la película ‘Grease’.
Cárdigan del instituto ‘Rydell High’ que llevó John Travolta en la escena final de ‘Grease’
Y es que, estas ‘bombers’ de estilo ‘sport’ retro son una apuesta segura. Desde personalidades como Lady Di, fotografiada en en 1991 con una chaqueta verde estilo ‘college’ de los Philadelphia Eagles, hasta Gigi Hadid o Kaia Gerber más recientemente han utilizado este estilo en sus looks más ‘street style’.
Tanto es así, que casas como Lacoste o Ralph Lauren, o marcas de ropa más ‘low cost’ como Pull and Bear o Bershka han lanzado colecciones inspiradas en esta tendencia, muy ligada también al estilo ‘Ivy League’. Desde Purpurina Magazine, hemos querido darle una vuelta más a esta reciclada tendencia y añadirle nuestro toque. Os dejamos a continuación, nuestra versión del estilo ‘college’.
El pasado mes de enero la plataforma de streaming HBO estrenó el primer capítulo de la segunda temporada de una de sus series más famosas y reconocidas, “Euphoria”. Desde entonces todas las semanas sus fans hemos estado atentas cada lunes impacientes para ver dónde nos llevará la historia con sus nuevos episodios.
Desde el inicio, esta serie ha significado un gran referente estético para esta revista, sobre todo debido a su impresionante dirección de arte y fotografía, y es por ello que hoy haremos un repaso de los últimos capítulos estrenados para ver cómo se presenta esta temporada a nivel artístico visual.
Antes de todo hemos de decir que este artículo contiene algunos ‘spoilers’ de los cuatro episodios recién estrenados de la serie, por lo que recomiendo a aquellos que aún no se hayan puesto al día que se metan en la cama con el ordenador, se hagan un maratón y vuelvan a nuestra página web a terminar de leer nuestro pequeño análisis de lo visto hasta ahora en Euphoria.
La primera temporada de la aclamada serie se estrenó en 2019, pero debido a la pandemia su segunda parte fue retrasada casi dos años. No fue hasta el inicios del 2022 cuando pudimos ver esa esperada temporada, aunque el año pasado Sam Levinson, creador de la serie, nos tranquilizó un poco estrenando dos capítulos especiales donde tuvo que utilizar recursos como el diálogo y monólogo para enfocarse en las principales protagonistas de la historia, Rue y Jules.
La estética de la primera temporada destaca por sus luces neones, colores brillantes y ‘glitter’ por doquier, un completo viaje alucinógeno visual. Aun cuando está nueva temporada conserva muchos rasgos de la primera, vemos ahora un poco la presencia de tonos muy saturados entre los azules y los amarillos, dandole un punto mucho más punk a esta segunda parte de la serie.
Esta estética punk-retro ‘dosmilera’ la llevamos viendo mucho durante el último año, y cómo no, una de las series más al día con las tendencias de la generación Z no iba a ser la excepción. Sin embargo, el uso de este enfoque visual se debe más a la nueva trama, mucho más cruda y oscura que en la anterior, y no está ligado en su totalidad a las modas.
Los últimos capítulos nos están dando una visión mucho más ruda de una adolescencia llena de violencia y droga, y esto claramente está representado a nivel estético. Por ejemplo, la manera en la que vemos a Rue consumiendo drogas esta temporada ha cambiado bastante con respecto a la anterior. La vemos mucho más destruida y acompañada de un ambiente más real, y puede que esto se deba al gran número de críticas que recibió la serie en su estreno debido a una supuesta romantización de las drogas, debate en el que no vamos a entrar hoy pero que puede haber influido la perspectiva e incluso la trama.
Desde el primer capítulo de esta segunda parte nos damos cuenta de que nos estamos adentrando mucho más en el mundo del narcotráfico introducido por la historia del personaje de Fez. Levinson encaja este tema de una manera muy interesante ya que se inspira bastante en las películas de mafia propias de Martin Scorsese, utilizando recursos típicos como las transiciones con puertas o los movimientos de cámara que vemos sobre todo en la primera secuencia del primer capítulo donde se cuenta a modo de flashback la historia de Fez. Incluso, al final de este episodio, vemos una referencia directa a la película “Infiltrados” (2006) en el botellazo de Fez a Nate.
En cuanto a los personajes, Euphoria es una serie que se adentra muchísimo en su mundo interior, cosa que a su vez se transmite a través del aspecto físico de estos y de como los retrata la cámara. Por ejemplo en Jules vemos un cambio notorio con respecto a la primera temporada, dejando a un lado el estilo colorido ‘girly’ por algo mucho más ‘grunge’. Si vemos el capítulo especial de Jules del año pasado, recordamos el debate que este personaje tenía acerca de la feminidad y de la forma en la que la utilizaba para gustar a los hombres, por lo que puede que este cambio se deba bastante a ese dilema personal.
Esta controversia personal de estilo también se ve reflejado en el personaje de Cassie, quien cambia constantemente de look al su autoestima estar construida en base a los hombres, vamos ‘daddy issues’ en todo su esplendor.
La puesta en escena también dice mucho de los personajes, y una de las principales secuencias a destacar es una de las últimas del primer episodio, aquella grabada en flashes que enfoca a los personajes y retrata de manera visual los posibles dramas por lo que pasará cada uno esta temporada. Por ejemplo, la fotografía de Cassie, Nate y Maddy representando a la perfección su triángulo amoroso, o Kat agobiada por los sentimientos hacia su novio.
Por otro lado, en esta temporada vemos interesantes recursos fílmicos ya previamente utilizados en la primera parte, y otros totalmente nuevos. Volvemos a ver el uso del flashback al inicio de algunos capítulos para así contar la historia de los personajes o de su familia como sucede con Fezco o con Carl Jacobs, ambos muy logrados a nivel estético. También está presente de nuevo esa ruptura de la cuarta pared por parte de Rue que tanto gustó en la anterior temporada, cuando este personaje le habla directamente al espectador a modo de exposición pasando diapositivas.
Entre las novedades destacan, por ejemplo, esa salida de la trama narrativa de Lexie como si ella fuese la directora de Euphoria mostrándonos a modo de documental la grabación de la serie. Otra escena innovadora muy aclamada por el público es la que Kat se imagina a un grupo de ‘influencers’ aparecer en su habitación y gritando frases de falsa positividad y autoayuda siendo esto una auténtica crítica a la cultura de la positividad banal de redes sociales.
En definitiva, Euphoria es una serie que nunca deja de sorprendernos, y desde Purpurina Magazine seguiremos comentando y analizando los nuevos capítulos que nos tienen preparados Levinson y su equipo.
Cuando hablamos de la estética «tenis» nos encontramos con una corriente de moda muy vinculada con el ‘preppy sport’ y el estilo ‘athleisure’. Este estilo se caracteriza por prendas principalmente creadas para el uso deportivo y el ‘street style’ con gran inspiración universitaria del Ivy League americano. Este estilo ‘preppy’ se caracteriza por prendas básicas como sudaderas o polos, pero también por blazers, cardigans o faldas de tablas. Es un estilo muy femenino y cómodo a la vez que elegante.
«Dawson’s Creek» (1998)
La tendencia ‘preppy’ tiene su origen en el Estados Unidos de los años veinte, donde las universidades más prestigiosas del país decidieron incorporar uniformes muy sofisticados inspirados en la moda inglesa victoriana. Con los años, este estilo, al ser adoptado por personas pudientes, con muchos recursos y asociadas a la idea de éxito de la época, comenzó a cobrar mucha fama, naciendo así marcas como Lacoste, Tommy Hilfiger o Ralph Lauren.
Fotograma de la serie «Gossip Girl» (2007)
Podemos ver la evolución del ‘preppy’ en películas como «Grease» (1978), en iconos como Lady Di o en series como «Dawson’s Creek» (1998) o «Gossip Girl» (2007).
Y es que, a pesar de haber sido una constante en el mundo de la moda, el estilo deportivo de tendencia vintage vuelve a estar muy de moda. Vemos por doquier prendas que antes sólo asociábamos al deporte, como las faldas de tablas, los calcetines altos, las ‘dad sneakers’, pantalones ciclistas…
Si algo nos enseñó Lady Di sobre moda que dejó marcada las siguientes generaciones fue su estilo “preppy sport”. Diana, una adelantada a su tiempo, usó el estilo ‘athleisure’ y se convirtió en todo un icono del mismo. Sus looks con ‘shorts’ ciclistas y sudaderas anchas de estilo universitario combinados con bambas blancas resultan ser un look cómodo y sencillo pero con un toque elegante.
Lady Di
Otros iconos de la moda tenis actualmente son algunas como Kendall Jenner, Hailey Bieber, las hermanas Bella y Gigi Hadid o la cantante Selena Gomez.
Hailey Bieber
Desde Purpurina Magazine hemos querido recrear esta tendencia tenis y para ello, hemos decidido realizar dos looks ‘preppy sport’ dentro de una pista de tenis. Esperamos que os gusten muchísimo.
La Vanity Fair de la Serpentine Gallery de Londres de 1994 marcó un punto de inflexión tanto en la moda como en la historia de Inglaterra. Ese día, la princesa Diana de Gales asombró a todo el mundo luciendo un vestido de Christina Stambolian que posteriormente sería bautizado por la prensa como el ‘Revenge Dress’.
Para entender por qué se le dio este nombre al diseño debemos remontarnos a la mañana de ese mismo día, cuando en la televisión pública británica se emitió un documental en el que el príncipe Carlos, aún marido de Diana, admitió su relación con Camila Parker y, por ende, su infidelidad hacia Lady Di.
La princesa Diana dado al claro bochorno que había significado la declaración de Carlos no tenía nada de ganas de acudir a la gala benéfica pero fue su mayordomo y confidente, Paul Burrell, quien le animó a ir. Según cuenta la historia, Burrell sacó el vestido del armario de la princesa y le sugirió ponerselo, y aunque a Diana en un principio le pareció demasiado atrevido, finalmente se arregló como nunca y se presentó en la gala con el que se podría denominar el vestido más polémico de la historia de Inglaterra.
El diseño de Stambolian consistía en un little black dress negro asimétrico con una cola lateral compuesta de capas de tela que llega hasta los tobillos. Esta es la perfecta descripción de un vestido que rompe absolutamente todos los protocolos de la familia real. Por un lado, para los royals el color negro es un tono estrictamente reservado para el luto en actos públicos, y por otro, lo más probable es que el pronunciado escote y el corte por encima de las rodillas haya causado una gran serie de desmayos entre miembros de la conservadora familia real.
Por eso se le tituló ‘Vestido de la Venganza’, porque con él Diana le dijo al mundo que era una mujer fuerte e independiente, que no dependía de ningún hombre para lucir impresionante, y que nadie podía decirle qué hacer. Con solo ponerse un vestido, Diana gritó a través de su imagen que allí estaba, más fuerte y guapa que nunca, con toda la seguridad del mundo a pesar de ser abochornada horas antes en frente de todo el país.
Lady Di con el famoso ‘Revenge Dress’.
También cabe destacar, que este acontecimiento marcó un antes y un después en la forma de vestir de Lady Di, quien a partir de ese momento comenzó a vestir de una manera mucho más arriesgada con altos tacones y faldas cortas convirtiéndose según muchos en la glamurosa princesa que hoy en día recordamos y admiramos.
Por su lado, el polémico vestido se convirtió en un gran icono de la moda dada a su obvia belleza y a su jugoso trasfondo, siendo versionado por muchas firmas reconocidas y sirviendo de fuente de inspiración para miles de mujeres en todo el mundo debido al empoderamiento que simboliza.
Maquillajes con purpurina, perlas y brillos, ropa llamativa y accesorios extravagantes. Esta es nuestra generación, jóvenes que expresan cada vez más su personalidad a través de su estilo personal. Debido al auge de redes sociales como Instagram, los Z han aprendido a mostrar su forma de ser mediante su ropa y su maquillaje. Vogue ha designado esta corriente como ‘movimiento beauty’, una mezcla de realidad y fantasía inspirada en la pasión que tiene la generación Z por el maquillaje. Hemos roto los típicos estereotipos de belleza y maquillaje expresando quiénes somos a través de la estética, cada vez arriesgando más con nuestros maquillajes o looks. Y algo que nos ha ayudado a exteriorizar esto ha sido la serie de Euphoria, de la que hablaremos en profundidad más adelante.
No es ningún secreto que cada color evoca emociones distintas: la calma y tranquilidad del azul, la energía del naranja o del amarillo, la lujuria del rojo… Cada color nos hace sentir de una forma distinta. Lo mismo sucede con nuestra ropa o maquillaje, nos hace sentir de una forma u otra y da sensaciones que pueden ser percibidas de distintas maneras. Son mensajes subliminales que nos dan mucha información sobre las personas que los llevan. Cada persona es un universo entero y eso es lo que hemos querido demostrar.
En el post de hoy hemos querido recrear tres maquillajes completamente distintos de la mano de Laura García, la maquilladora por excelencia de Purpurina Magazine y a quien admiramos enormemente. Hemos realizado tres looks completamente distintos entre sí, aprovechando además distintas luces del día. Con esta combinación hemos querido expresar algunos rasgos de la personalidad de cada una de nosotras, llevándolo al extremo en el maquillaje.
Me baso en maquillajes de personas a las que admiro, experimento con diferentes ‘looks’ y me gustaría aprender más y dedicarme a ello de forma profesional
Laura García
Aunque a ella siempre le ha gustado ese mundo, Laura lleva casi tres años en el mundo del maquillaje, cuando empezó con su cuenta artística y de maquillaje. Empezó como todos empezamos, probando y experimentando poco a poco, viendo vídeos de YouTube y aprendiendo a hacer diferentes combinaciones. Hoy en día, busca especializarse y crear su hueco en esta industria. Os dejamos a continuación el resultado de la sesión.
Artículo por Sara Arbelaez y Mar de Garrido
Fotografía y edición Rosell Mongay
Staring Rosell Mongay, Sara Arbelaez y Mar de Garrido
El término sororidad se define como la agrupación que forma la amistad y reciprocidad entre mujeres que comparten el mismo ideal y trabajan por alcanzar un mismo objetivo. La sororidad es la hermandad entre mujeres en oposición a la competitividad y odio entre las mismas.
Hoy 8 de marzo, en lugar de mandar un mensaje pesimista sobre la desigualdad en la que tristemente seguimos viviendo las mujeres en pleno 2021, desde Purpurina Magazine hemos querido recalcar esas cosas que el feminismo poco a poco ha conseguido en los últimos años. Queremos dar un mensaje esperanzador, algo muy necesario teniendo en cuenta lo negativa que es la situación este Día Internacional de la Mujer.
Es por ello por lo que hoy hablaremos de la sororidad, un valor que por suerte está cada vez más presente en nuestra sociedad. Podríamos decir que el auge de este concepto fue el movimiento #MeToo en 2017 cuando millones de mujeres nos dispusimos a apoyarnos mutuamente confiando en la palabra de las otras para denunciar cientos de injusticias calladas durante años. Fueron miles las mujeres que al sentirse apoyadas encontraron la confianza suficiente para confesar abusos que habían sufrido sin tener miedo a ser tildadas de mentirosas. El auxilio entre nosotras hizo que terribles delitos salieran a la luz y que finalmente se hiciera justicia.
Pero la sororidad únicamente no se basa en apoyar a víctimas y en creer en su palabra, la sororidad tenemos que aplicarla hacia todas las mujeres en nuestro día a día. En el trabajo, con nuestras amigas, con la familia, tenemos que dejar a un lado la rivalidad estúpida que se nos ha fomentado y luchar entre todas para lograr nuestras metas.
Por suerte, cada vez vemos más cómo los estereotipos de mujeres compitiendo entre ellas y criticándose van desapareciendo. Las series y películas en las que veíamos a dos chicas como enemigas compitiendo por un chico han sido sustituidas por otras donde amigas trabajan juntas para alcanzar los mismos objetivos profesionales cómo puede ser “The Bold Type”; La rivalidad, en realidad falsa, entre Britney y Aguilera la hemos cambiado por el apoyo mutuo entre compañeras de profesiones propio de Gigi y Kendall.
Se podría incluso afirmar que hoy en día millones de mujeres nos hemos dado cuenta que fastidiarnos a nosotras mismas no tiene sentido y más aún cuando los objetivos que buscamos son similares. En Purpurina Magazine la sororidad es uno de nuestros valores claves ya que consideramos que el apoyo y el compañerismo es un recurso intangible muchísimo más poderoso y efectivo que la crítica y la competitividad; es por ello por lo que escribimos este artículo, con el fin de ponernos como meta aplicar la sororidad todos los días del año, ya que esta es la única manera de conseguir nuestra deseada igualdad.